lunes, 14 de julio de 2014

Lealtad y valía

El funcionario, en general, opera con criterios de lealtad, jerarquía y subordinación.

Y esta frase, amigos, resume la clase política Española. Gente acostumbrada a ceder, agachar la cabeza, hincar rodillas y practicar una felación más intensa que sus colegas de partido al superior de turno del que depende su próximo cargo en el partido o en el gobierno.

Cuando el progreso (profesional, laboral o personal) está basado en la lealtad y no en la valía, nos encontramos con inútiles leales.

Obviamente, habrá honorables excepciones, como en todo. Hay demasiado político como para que, estadísticamente, no se salve ninguno. Pero desde luego hablamos de excepciones y no de reglas.

Frase sacada de este estupendo artículo de El Confidencial, sobre el nuevo Secretario general del PSOE.
http://bit.ly/1jrHUDK