miércoles, 22 de octubre de 2008

Feminazismo

El hombre y la mujer son iguales, o al menos eso dicen los papeles escritos en el último medio siglo. Sin embargo, dada la historia y tradición el hombre es más fuerte, más valido para todo... ¡La mujer a la cocina!
Llegó un momento en el que el tema cambió, con un poco de cultura en manos femeninas se dieron cuenta de que no todo se limitaba a los niños y los fogones y que valían para mucho más; y la verdad... con toda la razón.
El problema llega cuando la sociedad pierde el cauce y se pone todo patas arriba y acabamos liando la de Dios. Llega cuando de la igualdad pasan a la discriminación positiva. Y a mi ver eso contradice lo que las propias sociedades de mujeres gritan a voces: la igualdad. Yo creo, y ahí discrepo con una gran mayoría, que realmente los hombres y las mujeres no somos iguales. Ambos tienen ventajas y desventajas, puntos fuertes y puntos débiles. Lo que no podemos es jugar con ambas teorías cogiendo lo bueno de cada una.

Ahora me dirijo a todas aquellas feminazis (llámese feminazi a toda feminista extrema) que van de asociación en asociación berreando a los cuatro vientos que somos iguales... cuando piden ventajas para las mujeres. ¿Ventajas por qué?, si somos iguales. ¿Por qué hay que exigir un porcentaje de ministras? ¿por qué hay que exigir menos en las pruebas físicas de la policía? ¿Por qué los casos de violencia de género contra el hombre no se toman en serio? Me parece estupendo que se busque una homogeneidad y un rechazo total al machismo arcaico que dominaba a nuestros abuelos. Sin embargo es absurdo la cruzada que se tiene contra los hombres desde esas sociedades.

Por ejemplo, vamos a montar una empresita, sólo mujeres. Ala que bien, que buena iniciativa, salimos en antena 3 (no tienen nada que poner mejor...) y quedamos como las guays. Innovadoras, emprendedoras, subencionadas hasta los ojos, bien visto por la sociedad... supermegaguay del paraguay.
Cambiemos la hipótesis. Voy a montar una empresa sólo de hombres. ¿por qué? porque no me da la gana contratar mujeres. Es mi empresa y contrato lo que quiero. Y cuando vaya a contratar a un economista, pongo en la oferta "sólo hombres". Bueno... ¡se lía la de Dios! Tengo encima hasta a la ministra de igualdad con los tanques y tancas (de Carme Chacón).

Hay muchos más ejemplos, tenemos los anuncios retirados porque salen mujeres fregando suelos... Claro, que para anunciar lavadoras siempre es mejor "cambiar al marido" que no sabe programarlas. Son anuncios mucho más dignos y nada discriminantes.

A lo que íbamos, las feminazis podían quedarse en casa o hacer algo de provecho en vez de denunciar anuncios y dar por culo . Y que las que de verdad busquen igualdad, que luchen todo lo que haga falta. Que trabajen lo mismo, que cobren lo mismo, que tengan las mismas oportunidades y que no tengan problemas cuando se queden embarazadas. Y de verdad esas tienen mi apoyo 100%. Las otras... unas extremistas más, al igual que los hay en política o fútbol. Y a los extremistas ... ¡ni agua!

3 comentarios:

  1. A mi me pasa lo mismo. Los extremos no son buenos en temas en los que tienen que ver los derechos. Yo también vi la noticia de la empresa de mujeres y lo primero que pensé fue que no megustaría estar en ella, y después que no me parecía la forma de luchar contra esa desigualdad. La igualdad es tratar a todos como personas.
    Buena reflexión.

    Un saludo!

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  2. Hay mucha DOBLE MORALIDAD e HIPOCRESIA en la sociedad^^ asique a joderse, buen apunte aunque ya era consciente.

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  3. Paseáte por la página de Bibiana Aído, que es muy divertida. Yo ya me he cansado de ponerle comentarios que no me ha publicado (otros sí) para decirle que no va por buen camino. Pero, qué sabrá ella... Sólo es una ministra.

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