jueves, 25 de marzo de 2010

El día que falle mi programa

Como estudiante de informática que soy, de una ingeniería informática (actualmente un ciclo corto, pero me gustaría terminar el 2º ciclo y ser ingeniero completo) quería comentar acerca de ciertas declaraciones.

En el vínculo que he puesto antes, y en respuesta a una queja presentada, el Defensor del pueblo pone en su boca (o en su puño y letra) una frase que a mi personalmente me deja más tranquilo:

Consideran que la regulación de las profesiones de ingeniero e ingeniero técnico en informática no parece justificada puesto que no se presta de forma directa a consumidores que requieran de una especial protección por estar sujetos a daños graves o irreversibles en su salud o seguridad personal.

Esto viene a decir que no es lo mismo que se caiga un puente a que pete el programita que has diseñado. Vamos, que si se cae el edificio que han construido los arquitectos pues pueden perderse vidas pero que ese caso no se da ante errores cometidos por aplicaciones informáticas.

Y digo que esto me queda más tranquilo porque el día que alguno de mis trabajos hagan que 6 personas reciban una una dosis brutal de radioterapia por un fallo informático, pues no podrán exigirnos responsabilidades ¿no?

En definitiva, que sus argumentos se caen por su propio peso. Pero es uno de los problemas de España, que nos gusta llegar tarde y mal a los sitios. El día que le demos la suficiente importancia, ya no a la informática en sí, sino a todas las tecnologías y a toda la I+d+i dejaremos de comprar avances a precio de oro, para comenzar a venderlos nosotros. Mientras tanto... siempre podemos emigrar, ¡en muchos países se pegan por nuestro trabajo!

1 comentario:

  1. Me parece guay, ahora bien, los Ingenieros en telecomunicaciones... no estarían en la misma situación que nosotros?

    Ahhh me olvidaba que ellos tienen untados a suficientes peces gordos y nosotros no... que olvidadizo soy aveces.

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